Cuando pa' Chile me voy!

La última semana de diciembre del año pasado nos fuimos de vacaciones a Chile. Esta entrada está dedicada a Valdivia.
Hermosa semana antes del incendio que me "quemó la cabeza" ... todo lo descansado se esfumó. Pero bueno... la vida es así y hoy tengo los lindos recuerdos de esos días en el país vecino y amigo.

Cada vez que vamos aprovechar a comer pescado y mariscos (Churu más que yo con los mariscos) porque son exquisitos y mucho más baratos que en Argentina (que pese a tener semejante océano lo cobran como si fuera el producto menos disponible del país).

Cruzamos por el Paso Cardenal Samoré, el que sale de Villa la Angostura y pudimos ver todos los efectos del volcán Puyehue. La cantidad de ceniza es impresionante. Pero la villa sigue su vida normal y está super limpia. El único problema es si se levanta viento. Luego, todo igual.

En el paso mismo luego de inmigración argentina paramos a caminar sobre ceniza.

El paisaje parecía del fin del mundo pero esa desolada belleza tenía algo especial. Muchos árboles estaban secos pero, de pronto, surgió esta laguna turquesa surrealista. Lo que se ve en los costados de la laguna es ceniza flotando.

Pero lo más impresionante estaba por llegar. Ver la nube que emanaba el volcán en actividad.

Al otro lado, en Chile la ceniza seguía transformando el paisaje y dándole un toque distinto a todo.
Y la belleza de estos chilcos resaltaba aún más.

El verde de esta hoja de nalca había cambiado completamente.

Y los amancay fueron el mejor regalo de bienvenida!
Del lado argentino son muy difíciles de ver y hay poquitos. Quizás hay que caminar mucho para llegar a ellos. En Chile decoraban los costados de la ruta! Un placer a la vista.

El primer destino fue Valdivia (luego de una pasadita por Osorno). Ya lo dije muchas veces y lo repito: cómo me gusta esta ciudad! Me parece linda linda por donde la mire. Lindo tamaño, linda gente y un enclave geográfico espectacular. Río, mar, humedales y mucha pero mucha vegetación. Hace falta algo más?

A la tardecita del día que llegamos fuimos a picar algo por ahí. Siempre lo digo y nuevamente lo corroboré ... no hagan caso a las recomendaciones de lugares que les hagan en las oficinas de turismo .. siempre los mandan al lugar más caro (sea bueno o sea malo). Así nos pasó a nosotros pero bueno ... la cerveza y el lugar estaban lindos, justo en el paseo de la costanera cerca de la Feria Fluvial.

Y nos tomamos una rica cerveza Kunstman roja.

Al otro día fuimos a caminar y conocimos el bello jardín botánico que está en la Isla de Teja pegado a la universidad. La universidad en sí no se puede creer ya que está inmersa en un jardín! Hay verde por donde uno mire. Pienso que estudiar en un lugar así debe incentivar un poco más que estar en pleno cemento como me tocó a mí.

Y por la tarde fuimos a Niebla, a unos kilómetros de la ciudad y donde está la playa. Allí también están los antiguos fuertes españoles que resistieron todo tipo de ataques marítimos.
Primero fuimos a Los Molinos .. una caleta de pescadores donde hay varios lugares para comer. Y nos dimos una panzada!

Rico ceviche ...

Empanadas de camarones (rellenas con queso! un toque inesperado pero bien recibido). También pedimos de centolla pero no estaban tan buenas.

Así se veían las empanadas por fuera.
Y la entrada infaltable fueron las sopaipillas (tortas fritas) y el pebre!!!!

Cómo me gusta esa salsita:

Y finalmente llegó el congrio a la plancha con papas duquesa (son esas papas que parecen noisette pero en realidad son una bolita de puré de papas rebozadas).

Otra cosa que me encanta aunque no sean muy sanos son los panchos! No como seguido por esa razón pero en Chile me llama la atención esta manera de servirlos: con muuucha palta y tomate!!!! (que además es baratísima y hay por todos lados). Y se pide como un completo (no les dicen "pancho").

Y luego de tal panzada fuimos a la playa ... tremenda siesta me eché!
Hacía mucho calor y el sol era muy fuerte .. por suerte en las playas te alquilan sombrilla y la ponés donde querés.
El agua estaba fríaaaaaaaa pero igual estuvo lindo tocar la arena negra.

Y el otro paseo infaltable en Valdivia es ir a la Feria Fluvial. Todos los días de 9 a 13 horas cerca del puente.
Ya había ido antes y no me canso de ir. Amo las ferias y el clima que se vive allí. Y me da gusto ver linda y fresca mercadería.
En este viaje el hallazgo fueron los ajos chilotes!!! TREMENDOS AJOS! ocupaban casi toda la palma de una mano. Nos llevamos dos .. queríamos usar los dientes de uno de ellos para plantarlo pero ... nos los comimos todos. Habrá que volver a buscar más ;)

No son tan fuertes como los ajos comunes y son muy jugosos!

Me quedé con ganas de comer reyneta! rica rica... también habrá que volver.

Aquí se ve la colorida feria con sus toldos inconfundibles.
A un lado están los puestos de pescado, cerca del río lleno de aves esperando algún trozo de pescado. También hay muchos lobos marinos y pelícanos.
Y del otro lado están los puestos de frutas y verduras.

Qué ojo el del cormorán!

El deporte más popular en Valdivia es el remo y se ve mucha gente practicándolo.


Quesos y quesitos.